Billie Eilish organizó una fiesta de escucha para Hit Me Hard and Soft y fue todo un éxito.

Para celebrar el lanzamiento del último álbum de Billie Eilish, «Hit Me Hard and Soft», American Express se unió a la cantante para organizar una fiesta de escucha en NYC antes del lanzamiento del álbum, y tuve la oportunidad de asistir al evento en nombre de Teen Vogue. Y fue sin duda una experiencia, por decir lo menos.

Cuando llegué al Barclays Center, casi olvidé que no estaba allí para un concierto, dada la multitud de fans esperando para entrar. Todos estaban listos para escuchar y ver a Eilish. Entré rápidamente por el lado de los miembros de tarjeta American Express, lo cual aceleró el proceso de check-in. Una vez que pasé la seguridad, me recibieron dos acomodadores con un sobre que contenía un cupón exclusivo de Amex para la tienda de productos.

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La arena estaba repleta de fans: la gente esperaba en diferentes colas por todos lados para comprar bocadillos, bebidas y merchandising, así que me abrí paso entre la multitud para entrar en la cola exclusiva para miembros de la tarjeta Amex. Las opciones eran geniales, aunque limitadas: podías elegir entre dos sudaderas (cada una por $125), una sudadera con cremallera burdeos o un jersey negro, una camiseta de cuello redondo con gráfico negro ($50) y una camiseta sin mangas gris con gráfico ($50). Opté por la camiseta sin mangas porque sentí que era la más versátil para mi guardarropa.

Después de eso, fui a la tienda de American Express a comprar algunos bocadillos y me sorprendió gratamente el concepto sin efectivo. Pasé mi tarjeta para entrar a través de los torniquetes estilo metro (puertas transparentes) y desde allí, solo tuve que agarrar lo que quería y listo (me dijeron que había sensores por toda la tienda que rastreaban lo que tomabas y cargaban automáticamente tu tarjeta).

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El ambiente dentro del lugar se asemejaba mucho a la portada del álbum: todo era azul… luces azules y letras azules enormes en el suelo que decían «Hit Me Hard and Soft». Mientras esperaba a que saliera la estrella pop, pude disfrutar de mis bocadillos y tener una buena vista del lugar. Estaba lleno de arriba abajo y vi fans con llamativas gorras verdes neon por todas partes (lo cual me recordaba al anterior cabello verde vibrante de Eilish). Incluso escuché una conversación detrás de mí entre dos mejores amigas que habían viajado desde Washington D.C. para venir al espectáculo, así que si era seguro decir que esa noche estaba entre verdaderos fanáticos incondicionales de Billie.

Eilish estaba inicialmente programada para comenzar alrededor de las 8:30/9 pm, pero después de un anuncio por los altavoces, todos los asistentes fueron informados de que comenzaría a las 9:30 pm para permitir que más fans ingresaran antes de comenzar el espectáculo. Ella salió exactamente a tiempo con su look característico luciendo una camisa extragrande de manga larga, pantalones cortos de baloncesto y una gorra de béisbol. Sus primeras palabras fueron, «¿Cómo están?» y recibió una fuerte y estruendosa respuesta de vítores y gritos en toda la arena. Continuó con, «Chicos… Acabo de cagarme encima», y mencionó su nerviosismo. Luego explicó que dejaría que se reprodujera todo el álbum sin pausas ni interrupciones… y así lo hizo. El espectáculo comenzó, y durante los siguientes 45 minutos, todos vimos a Eilish correr, bailar, sentarse, recostarse y pararse en medio del suelo. Su hermano, Finneas, también actuó como camarógrafo, tomándole fotos todo el tiempo; incluso le arrebató la cámara en un momento y la dirigió hacia él.

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Eilish mostraba amor en todos los sectores de la arena, corriendo constantemente por el suelo para tocar manos y dar high fives a los fans sentados en las primeras filas. También hubo muchas luces intermitentes, niebla y efectos de iluminación geniales que añadieron algo de drama a la fiesta. Una vez que terminó la última canción, Eilish tomó el micrófono y dijo, «Bien, eso es todo. ¡Adiós!» y se retiró.

Fue la primera vez que asistía a una fiesta de escucha de un álbum, y no puedo mentir… me lo pasé genial, al igual que todos los fans a mi alrededor. También acordamos todos en regresar para verla en concierto en el Madison Square Garden en octubre. Hasta entonces, estaré reproduciendo «Hit Me Hard and Soft» una y otra vez.