SALUD Alerta por altas temperaturas

Alimentación sana para cuidarse del calor

Los menús deben ser variados. Frutas y verduras son indispensable a la hora de cocinar.

jueves, 10 de diciembre de 2020

Las vacaciones no significan descontrol en la alimentación. Ahora bien, se ha tener en cuenta una serie de factores y de cambios para lograr que la nutrición de los más pequeños en verano siga siendo la adecuada.

Durante estas fechas, el calor provoca que tengamos menos ganas de comer o que nos apetezcan comidas ligeras y frescas. Los niños no están excluidos de ello.

El desayuno, imprescindible. Aunque los niños suelen levantarse más tarde e incluso más inapetentes el aporte calórico y vitamínico del desayuno es clave para que puedan iniciar un día lleno de actividad. El desayuno debe aportar nutrientes para lidiar con toda una mañana de actividad.

Los horarios y cinco comidas. Podemos permitir a los niños cierta flexibilidad y relajación, pero lo recomendable es intentar respetar el horario de comidas al que están habituados. También han de realizar las cinco comidas habituales.

Ojo con la digestión. «Quiero irme ya al agua» o «¿Puedo irme a jugar fuera con mis amigos?» son frases habituales tras la comida. A pesar de las inmensas ganas que tienen los niños de seguir con sus actividades, no debemos permitirlo; lo conveniente es esperar entre una hora y media o dos. Ello dependerá del tipo de comida: si se ha realizado una comida más contundente o más liviana. Lo mejor en esta época es conveniente evitar las comidas grasas o pesadas que dificulten la digestión.

Fuente: http://www.desarrolloinfantil.net