SALUD En el Hospital Rawson

Magia y globos para crear conciencia sobre la hemofilia

Se conmemoró el Día Mundial de la Hemofilia y Fundame realizó varias actividades en las que pacientes, médicos, familias y funcionarios estuvieron presentes.

lunes, 17 de abril de 2017

Fue un día que no pasó desapercibido en el Hospital Rawson. Es que, una vez más, Fundame organizó actividades para conmemorar el Día Mundial de la Hemofilia. Esta fundación contiene a los pacientes que padecen la enfermedad desde hace 3 años. Les ofrece la posibilidad de hacer hidroterapia. Este año la idea es concientizar e informar sobre la hemofilia y la importancia de su profilaxis.

En la actividad del Rawson, que incluyó un acto de magia para los más chicos y una suelta de globos, estuvieron presentes el ministro de Salud Cástor Sánchez, el intendente de Capital, Franco Aranda, y otros funcionarios. Además se sumaron la Reina y Virreina del Sol, pacientes, médicos, familias y voluntarios.

Qué es la hemofilia

La hemofilia es un problema hemorrágico. Las personas con hemofilia no sangran más rápido que lo normal, pero pueden sangrar durante un período más prolongado. Su sangre no contiene una cantidad suficiente de factor de coagulación. El factor de coagulación es una proteína en la sangre que controla el sangrado. La hemofilia es bastante infrecuente. Aproximadamente 1 en 10.000 personas nace con ella.

Tipos de hemofilia

El tipo más común de hemofilia se llama hemofilia A. Esto quiere decir que la persona no tiene suficiente factor VIII (factor ocho).

Un tipo menos común es la denominada hemofilia B. Esta persona no tiene suficiente factor IX (factor nueve). El resultado es el mismo para la hemofilia A y B, o sea, un sangrado por un tiempo mayor que el normal.

Síntomas

Los signos de la hemofilia A y B son los mismos:

Hematomas extensos.

Sangrado dentro de los músculos y las articulaciones.

Sangrado espontáneo (sangrado repentino dentro del cuerpo sin que haya un motivo claro).

Sangrado durante mucho tiempo tras cortarse, sacarse una muela o someterse a una cirugía.

Sangrado durante mucho tiempo tras sufrir un accidente, particularmente luego de una lesión en la cabeza.

El sangrado dentro de una articulación o un músculo provoca:

Dolor o “una sensación extraña”.

Hinchazón.

Dolor y rigidez.

Dificultad para utilizar una articulación o músculo.