(Foto: Biblioteca Popular Juana Azurduy)
Cuando los niños leen más y desde más temprano, no solo hay una desigualdad en la destreza lectora sino que también en habilidades no verbales como el uso del pensamiento abstracto (el que se usa, por ejemplo, para armar un rompecabezas).
No sólo favorece el desarrollo de la inteligencia verbal, sino con el pensamiento abstracto; es decir, la imaginación.
Además, si leer influye en la inteligencia, los niños que no leen temprano demuestran habilidades intelectuales reducidas respecto a los que si lo hicieron, demostrables al llegar a la escuela.
Así que ya saben: si quieren que sus niños rindan mejor intelectualmente, fomenten la lectura temprana.
(Fuente: www.saludhoy.com)